Cómo utilizar Green IT para lograr una empresa más sostenible
En cualquier gran empresa, la tecnología es una de las principales fuentes de emisión de carbono, y también una de las áreas que más energía y recursos consume. Esto se debe a que, a lo largo de las décadas, el uso de TI ha ido creciendo en la mayoría de las organizaciones y, por el camino, estas han ido acumulando aplicaciones heredadas (demasiadas, en algunos casos) que se siguen utilizando con el pretexto de que “es lo que se ha hecho siempre”.
Hay que tener en cuenta que, probablemente, el departamento de TI de estas empresas sea grande, y pagar por licencias de software es un gasto importante. Además, gestionar centros de datos internos requiere de grandes cantidades de energía solamente para alimentar los servidores, que ocupan mucho espacio y cuya refrigeración es muy costosa.
En este contexto, prácticamente todos los sectores han empezado a apostar por la economía “verde”. No solo porque la sociedad es cada vez más consciente de la crisis climática y su impacto, sino también porque, en la actualidad, las empresas se enfrentan a normativas muy estrictas de sostenibilidad. Por tanto, necesitan consumir menos energía, producir menos carbono y reciclar sus equipos antiguos.
También es importante por otros motivos.
Los consumidores prefieren tratar con compañías responsables, preocupadas por el medioambiente. Del mismo modo, los empleados potenciales, especialmente los más jóvenes, no se sienten atraídos por las empresas que no tienen una política de sostenibilidad.
Es imposible transformar todas las operaciones de la noche a la mañana, pero es importante ir dando pasos en esta dirección. Empezar por la tecnología es una buena idea, ya que, como hemos visto, es una gran fuente de emisiones de carbono y, por tanto, mejorar su eficiencia traerá beneficios a corto plazo en materia de sostenibilidad.
También es una excelente estrategia para recortar gastos. Al fin y al cabo, disminuir el consumo de energía no solo reduce las emisiones CO2, sino que también ahorra dinero. Pero los beneficios son aún mayores al dar el siguiente paso.
Cuando la tecnología sea más ecológica, se podrá utilizar para que todo el negocio también lo sea. Es entonces cuando comienza la verdadera transformación.
Paso a paso hacia el Green IT
Lograr que los sistemas de tecnologías de la información sean más ecológicos contribuye a que toda la empresa se vuelva más sostenible y respetuosa con el medioambiente. Por eso, esta meta debería ser una prioridad para cualquier compañía. Pero ¿por dónde empezar?
Migrar a la nube es el primer paso. La nube es un entorno de servicios compartido que permite generar economías de escala y un ahorro de energía considerable.
Migrar a la nube no conduce automáticamente a un rendimiento más sostenible, pero no es posible mejorar el rendimiento de una empresa hasta que esta no empieza a operar en este entorno.
Para tener una empresa más ecológica, hay que tomar distintas medidas. Es importante transformar las plataformas de TI y las aplicaciones, pero también es necesario un cambio en la gestión y cultura empresarial.
Nada de esto sucede de la noche a la mañana: estamos hablando de una actividad estratégica que debe planificarse y ejecutarse cuidadosamente. Existen tres etapas en este proceso:
Etapa n.º 1: Optimización. Esta etapa abarca todas las medidas que se pueden tomar ya mismo, antes de implementar los grandes cambios necesarios para migrar a la nube. Hablamos de mejoras sustanciales en la eficiencia operativa, y de reducir la huella de carbono, optimizar el reciclaje, recortar gastos de desplazamiento y transformar las instalaciones y equipos para que sean más eficientes energéticamente.
Etapa n.º 2: Agilidad. Cuando los sistemas de TI sean más eficientes gracias a la migración (al menos parcial) a la nube, es el momento de analizar cómo la tecnología puede ayudar a que toda la empresa sea más sostenible. Por ejemplo, puede utilizarse el análisis de datos para identificar en qué áreas se derrocha energía, dónde existe un mayor potencial de contaminación, qué comportamientos se repiten innecesariamente y qué fallos hay en las operaciones de reciclaje. De este modo, se consigue que los procesos sean más eficientes en su totalidad.
Al dirigir la atención a estas acciones, se empieza a eliminar el carbono de las operaciones y a mejorar el rendimiento general. Hay que pensar en cuál es el punto de partida más lógico en la empresa: ¿revisar las cadenas de suministro y la logística?, ¿evaluar a los proveedores y partners para confirmar que también están tomando medidas encaminadas a la sostenibilidad?, ¿ayudar a los empleados a entender de qué modo pueden mejorar su propio rendimiento?
Etapa n.º 3: Transformación. Llegados a este punto, sería posible desenvolverse cómodamente en la nube. Como consecuencia, las funciones internas de TI se reducirán y se empezará a trabajar de forma colaborativa en un ecosistema compartido con otros usuarios de la nube. No solo se podrán desempeñar las mismas funciones que se realizaban antes dentro de la nube, sino que además se trabajará mejor. Pensar y actuar como un nativo digital supone hacer cosas diferentes.
Se podrán desarrollar nuevas propuestas de valor con más rapidez que antes, ya que ahora se realizarán en plataformas compartidas, de forma colaborativa y testándolas virtualmente. Asimismo, se podrán comercializarlas más rápido, entender mejor a los consumidores y segmentarlos de forma más precisa, utilizando los datos de manera creativa.
Además, otra de las consecuencias de esta metodología de trabajo es que disminuirá el consumo de energía y se reducirán las emisiones de carbono. La etapa de transformación es la que favorece una descarbonización real.
Pero ¿cómo se llega a este punto? ¿Y cómo puede ayudar NTT DATA en el proceso?
El reto de la transformación
La tecnología juega un papel clave a la hora de alcanzar un rendimiento más sostenible. En otros artículos breves y documentos alojados en nuestro centro de contenido, analizamos temas tan variados como:
- El uso del diseño para desarrollar entornos con bajas emisiones de carbono.
- Cómo las redes del futuro permitirán transferir datos más rápido utilizando mucha menos energía.
- El uso de la IA para la sostenibilidad.
- El crecimiento del IoT para un análisis de datos más sofisticado.
Estos temas son el centro de las investigaciones actuales y marcarán las iniciativas de implementación del mañana.
En NTT DATA ayudamos a las empresas a ser más ecológicas, sin importar su tamaño o el sector al que se dediquen. Entendemos esta transición como un proceso por etapas, que funciona de la siguiente manera:
Etapa n.º 1: Comprender la situación actual. Cada empresa es distinta y tiene sus propios objetivos y trayectoria. Hacer una evaluación precisa inicial es el primer paso.
Etapa n.º 2: Decidir la estrategia y las prioridades. Ningún cambio significativo es posible sin un liderazgo firme. Todas las divisiones de negocio deben estar al tanto de lo que se pretende hacer e implicarse en el proceso.
Etapa n.º 3: Trazar una hoja de ruta. Se corre el riesgo de perderse si no se planifica.
Etapa n.º 4: Comprometerse y organizar la asignación de responsabilidades. Ser verdaderamente ecológico supone movilizar a todos los miembros de una empresa y hacer un seguimiento preciso y genuino de los progresos.
Etapa n.º 5: Replantear las aplicaciones. Esta es, quizá, la tarea más importante de todas. La mayoría de grandes empresas tiene muchas aplicaciones heredadas y, aunque algunas se pueden reutilizar en la nube, otras muchas no. La principal medida que se debe tomar al respecto es la de implementar un conjunto de aplicaciones nativas de la nube, de ERP en adelante. Esto permite potenciar la eficiencia y reducir las emisiones de carbono, a la vez que se fomenta el trabajo colaborativo.
Para concluir, cabe destacar un par de cosas más sobre la sostenibilidad en materia de TI. Las empresas tienen la obligación de operar de forma más ecológica por el bien del planeta y las personas, pero no debemos olvidar que, además, las normativas actuales así lo requieren. No se trata de algo opcional, sino que los gobiernos son cada vez más exigentes en este sentido y esperan que las distintas organizaciones cumplan con unos estándares de calidad elevados.
No obstante, esto es a la vez una gran oportunidad. Transformar el modelo de negocio para encaminarlo hacia un futuro más verde se traduce en una mayor eficiencia, costes reducidos y una buena imagen de marca. Además, también aporta ventajas a la hora de captar talento joven, cerrar acuerdos con los mejores partners y proveedores del mercado y acceder a un ecosistema más rico.
Cuando se lleve a cabo la revolución verde en el departamento de TI, se podrá disponer de una empresa nativa digital que será más competitiva en el mercado actual, donde los cambios están a la orden del día.
Es lo mejor para el medioambiente, pero también es lo mejor para la estrategia de negocio y los accionistas. Para más información o para hablar con un equipo de expertos en la materia, ponte en contacto con nosotros